Saint-Pey-d’Armens – Las cruces de Saint-Pey d’Armens

Situado en la intersección del camino real de Burdeos a Bergerac y la carretera de Libourne, Saint-Pey d’Armens ha sido siempre uno de los principales cruces de carreteras de la Jurisdicción.

A lo largo de las carreteras o caminos, las cruces fueron durante mucho tiempo «hitos del paisaje», puntos de referencia para el viajero. La que se erigió en el cruce de Saint-Pey dio incluso su nombre al lugar en la salida oeste del pueblo. La cruz actual data de 1872, pero en el mapa de Belleyme ya aparece una más antigua a finales del siglo XVIII.

Entre las cerca de sesenta cruces que adornan los paisajes de la Jurisdicción, la mayoría del siglo XIX, destaca especialmente la del cementerio de la iglesia de Saint-Pierre-ès-Liens en Saint-Pey d’Armens. Es la más antigua y sin lugar a dudas la más monumental de todas; también es una de las más llamativas del departamento. Construida en los primeros años del siglo XVI, su decoración es característica del arte de la transición entre el Gótico flamígero y el Renacimiento.

Estas cruces de cementerio, conocidas como «cruces hosannières» (en referencia al Hosanna que se canta el Domingo de Ramos), son muy comunes en el oeste de Francia. A menudo asociadas a un osario, tenían una función en la liturgia funeraria, como atestiguan los pupitres esculpidos aquí en cada una de las cuatro caras de la base de la columna. El fuste de esta columna, ricamente esculpido, alberga ocho estatuas dispuestas en dos registros. En la parte inferior, figuran cuatro santos que se reconocen por sus atributos: Santiago con su bordón, San Pablo con su espada, San Pedro con su llave y San Juan con un cáliz. Encima hay tres mujeres y un obispo, todos decapitados y coronados con huesos y calaveras, lo que evoca el destino de cada uno.

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